Mis secretitos del corazón.

No puedo creer que el tener tan presente a Dios en mi vida, me haga sentir esta paz en el corazón. Lo digo porque antes mi mayor tristeza era que no encontraba a quien querer, deseaba con todas mis fuerzas poder tener a alguien con quien ver las puestas de sol, tener a quien robarle un beso o simplemente tener a quien abrazar. Sufría cada noche esa angustia, y la autoestima no podía estar tan esparcida por el suelo... da nostalgia recordarme en esos tiempos, el tanto sufrir, quizás influía la adolescencia y esas cosas, se me apretaba el pecho cuando oía hablar en ese entonces a mis compañeras contando sus experiencias con aquel muchacho, era una sensación tan triste.

No puedo creer que las cosas hayan cambiado tanto, ahora me siento tan tranquila... sin querer, y sin importarme si viene o no aquel príncipe azul. Y es que ahora me siento rodeada de tanta gente que me quiere, he podido disfrutar esos dulces abrazoss que antes estaban ausentes, hoy puedo demostrar lo que sientoo y ser agradecida hasta por un mínimo detalle, y creo que son esos abrazos los que han apagado esta sed loca de sentirme querida.

Aunque hay veces, cuando sale la luna y el cielo está depejadoo que vuelvo a anhelar aquel príncipe azul que nunca tuve.

=(